viernes, 16 de noviembre de 2012

Fastidiosas hemorroides

Hoy voy a hablar de un problema muy incómodo, tanto a nivel físico como a nivel psíquico, yaque socialmente es un tema tabú aunque las padezcan un 50% de la población. Muchos pacientes acuden a la farmacia para intentar aliviar de primera mano los tan molestos síntomas que presentan.
 Las hemorroides son venas que están en el ano y que cuando se dilatan se convierten en varicosidades (similares a las varices en las piernas), pueden molestar. Sus causas:


·  Se trata de una enfermedad muy frecuente. Es muy posible que mucha gente tenga en algún momento a lo largo de su vida síntomas derivados de las hemorroides.
·  Las causas más importantes en la aparición de hemorroides suelen ser el estreñimiento y los malos hábitos a la hora de defecar (permanecer mucho tiempo en la taza o hacer mucha presión al defecar).
·  La herencia también influye; si tus padres o abuelos las padecieron, puede que tengas mayor riesgo de tener hemorroides.
·  Durante el embarazo, es posible que las mujeres tengan un mayor riesgo de desarrollar hemorroides. Normalmente éstas desaparecen unas semanas después del parto.
·  Estar mucho tiempo de pie, o cargar mucho peso, puede favorecer o empeorar los síntomas de las hemorroides.
Lo más común es emitir sangre roja por el ano, bien en forma de gotas en la taza o en el papel higiénico. Normalmente el sangrado es escaso.
No son dolorosas, aunque dependiendo del tipo de hemorroides o por la aparición de alguna complicación, pueden provocar dolor. En ocasiones, las hemorroides pueden descender desde el interior del ano, salir y tener dificultad para volver a su posición original. Es lo que se llama prolapso. Aparece un bulto en el ano, que se acompaña de intenso malestar y dolor.
Cuando se restablece la posición normal, pueden producir picor y quemazón a nivel anal, sobre todo a la hora de defecar o limpiarse el ano.
Lo habitual es tratarlas con dieta y hábitos de vida saludables. Tu farmacéutico y/o médico decidirán si es necesaria alguna medicación adicional.
  • Durante las crisis:
    1. Baños de agua tibia-fresca (3-4 al día), durante 10-15 minutos, podrían ayudar a aliviar los síntomas como el picor o escozor.
    2. Cremas antihemorroidales, durante un tiempo limitado (no más de 5-7 días, porque le pueden provocar más sangrado).
    3. Analgésicos (por ejemplo: paracetamol, ibuprofeno, etc).
  • En la defecación
    1. Evita reprimir el deseo de ir al baño.
    2. Evita estar demasiado tiempo en el baño y los esfuerzos al defecar.
    3. Si las hemorroides se prolapsan (se salen del ano), lo mejor es intentar devolverlas a su posición habitual haciendo una leve presión con el dedo.
    4. En los periodos de crisis hemorroidal, para la limpieza puedes utilizar toallitas húmedas o hacer baños de agua tibia tras la deposición.
  • Para prevenir que vuelvan a molestar, es necesario tener en cuenta algunos hábitos de alimentación:
    1. Aumenta la cantidad de fibra en las comidas (frutas frescas, verduras, pan, cereales, etc).
    2. Bebe líquidos regularmente. Evita alcohol.
    3. Realiza algo de ejercicio regularmente.
  • En ocasiones es necesario la cirugía. Hay diferentes técnicas (tu médico y/o cirujano decidirá cuál es la mejor opción): 
    1. La ligadura en banda consiste en poner un anillo de goma alrededor de las hemorroides y éstas poco a poco van "deshaciéndose".
    2. Puede ser necesario la hemorroidectomía, o extraer las hemorroides del ano.
    3. También pueden ser coaguladas con láser o esclerosadas a través de inyecciones.

No hay comentarios: